Estado de las poblaciones

Presentamos las líneas de trabajo de nuestro proyecto que apuntan a conocer el estado de la población de yaguaretés en la región de la Selva Paranaense y el Chaco Argentino. Este trabajo incluye también la evaluación del estado de otras especies de interés (como el puma y otros felinos) y de las principales presas del yaguareté.

¿Dónde todavía se pueden encontrar jaguares en estas regiones?

Mediante enormes esfuerzos de campo y con la colaboración de numerosas personas e instituciones, hemos actualizado la distribución del yaguareté en las dos regiones. En Misiones lo realizamos mediante una red de monitoreo participativo con más de 300 colaboradores, en la región chaqueña mediante muchos años de relevamientos a campo y la reciente implementación del grupo de colaboradores en la región, que cuenta actualmente con 70 voluntarios que aportan valiosa información para el estudio de la especie.

Hasta hace pocos años se creía que la población chaqueña de jaguares era la más grande de Argentina, luego de nuestros estudios hemos descubierto que la población de jaguares chaqueña es la más amenaza del país. Cuando iniciamos nuestro trabajo en Misiones poco se sabía del yaguareté en la región, pero se pensaba que habitaban unos 500 animales. Nuestro trabajo permitió conocer que en realidad contamos con menos de 60 yaguaretés en esta zona, mostrando la urgencia de tomar medidas que la protejan.

¿Cuántos yaguaretés quedan en la Selva Paranaense y en el Chaco argentino? ¿Cómo responden estas poblaciones a los cambios en las amenazas y en los esfuerzos de conservación?

Para responder estas preguntas desde el Proyecto Yaguareté hemos desarrollado los relevamientos con cámaras trampas más grandes de los descritos para grandes felinos en el mundo, obteniendo estimaciones del número de animales que aún persisten en ambas regiones. Las cámaras trampa son cámaras fotográficas que cuentan con sensores de movimiento y nos permiten tomar fotografías del yaguareté y sus presas. Las fotografías del yaguareté y sus presas nos permiten tener estimaciones de la cantidad de animales que habitan en cada zona y monitorearlo en el tiempo para saber cómo están respondiendo a los cambios en las amenazas y acciones de conservación. En Misiones estamos conformando un álbum fotográfico de todos los yaguaretés conocidos de la región y llevamos un monitoreo permanente de las poblaciones. En el Chaco continuamos relevando áreas intentando dar con una primera estimación confiable de cuántos yaguaretés persisten en esta región.

¿De qué se alimentan los jaguares en estos sitios? ¿Existen presas suficientes para los jaguares? ¿Tienen competidores naturales en estas regiones?

Para conservar una población viable de yaguareté en la región es necesario asegurar que en la región existe suficiente comida. Para esto necesitamos saber qué especies de presas están disponibles en las diferentes regiones del Corredor Verde (y cuáles son los factores que las afectan) y de estas presas disponibles necesitamos conocer qué comen los jaguares en esta región. Es importante además monitorear otras especies relacionadas, como los pumas (Puma concolor) que es un potencial competidor del jaguar y los otros felinos de la región. Tanto en Misiones como en la región chaqueña aprovechamos los relevamientos con cámaras trampa para obtener información y monitorear la abundancia de las potenciales presas del yaguareté y también la abundancia de pumas y otros felinos. Utilizamos las heces de yaguareté y puma recolectadas para analizar su contenido y conocer las presas de las que se alimentan estas especies.

Grupo de Colaboradores del Proyecto Yaguareté

El Grupo de colaboradores fue creado para aportar valiosa información a la hora de estudiar los jaguares o yaguaretés. Los colaboradores colectan rastros de estos felinos para ser analizados por el equipo del Proyecto Yaguareté.

Estudiar a los grandes felinos no es tarea sencilla. Son animales que naturalmente alcanzan bajas densidades y en general son muy esquivos a los encuentros con el hombre, por lo que es muy difícil verlos en la naturaleza. Por eso, para saber dónde estaban presentes los jaguares en la Selva Paranaense decidimos aunar esfuerzos con todas aquellas personas de esta extensa región que quisieran ayudar a responder esta importante pregunta: formamos un gran grupo de colaboradores a lo largo de la región para poder registrar evidencia de la presencia de esta especie.

Monitoreo de la distribución

Un punto fundamental para conservar a una especie es tener un conocimiento actualizado de las regiones que todavía habita. A través de nuestras redes sociales mantenemos conectados a los colaboradores para conocer permanentemente los datos colectados.

Grupo de Colaboradores en la Selva Paranaense

Ezequiel Vanderhoeven es veterinario del Proyecto y es quien se encarga de visitar a los colaboradores para recolectar el material colectado y entrenar a nuevas personas que se suman para ayudar. Con técnicas y materiales mínimos que conforman el kit tigrero, los colaboradores ya están listos y atentos para comenzar su labor. Esta tarea es posible gracias a:

Grupo de Colaboradores en la región chaqueña

En el año 2015 se inició una iniciativa que pretende replicar la exitosa experiencia que hemos tenido con este mismo proyecto en el Bosque Atlántico de Misiones durante ya más de 10 años: crear el Grupo de Colaboradores en la región chaqueña. Sebastián Cirignoli, como coordinador de la región.Esta nueva actividad del Proyecto se está llevando adelante gracias al aporte económico de:

¿Cómo identificamos una huella de yaguareté?

Como los jaguares son difíciles de ver, encontrar sus huellas es una buena forma de saber que está presente. Sin embargo, las huellas de yaguareté son similares a las del puma (Puma concolor), el otro gran felino de América, y hasta a veces pueden confundirse con las huellas de los perros domésticos. Por eso es bueno tener en cuenta algunas características importantes que nos permiten diferenciar a las huellas de yaguareté:

Los felinos tienen garras retráctiles para proteger sus afiladas uñas, por lo que normalmente las uñas no quedan marcadas en la huella, mientras que los perros sí suelen dejar las marcas de sus uñas.
Las huellas de yaguareté usualmente son más grandes y redondeadas que las de otras especies de la región. Tanto la almohadilla como los dedos de la huella del yaguareté son más redondeadas y globosas, con bordes más suavizados que pumas y perros domésticos.
Los dedos en la huella del yaguareté normalmente se encuentran relativamente más cerca de la almohadilla que en las huellas de pumas y perros. Los dedos más cerca de la almohadilla y la almohadilla relativamente más grande y redondeada, hacen que en la huella del yaguareté la almohadilla represente una mayor proporción de la superficie de la huella que en las otras especies.

Estas características nos ayudan, pero no siempre son suficientes para identificar una huella. Las huellas traseras del jaguar se parecen más a las de los pumas, y esto suele causar confusión. Por ello, quienes quieren explorar más profundamente este tema pueden descargar la planilla identificadora de huellas del Proyecto Yaguareté que hemos desarrollado, en donde mediante medidas precisas sobre la huella se puede llegar a una identificación más confiable.

La presencia del yaguareté en la Selva Paranaense

El Grupo de Colaboradores colectó entre los años 2002 y 2008, más de 2600 registros de todo tipo a lo largo de unos 90.000 km2 en toda la Provincia de Misiones en Argentina, y las áreas boscosas más importantes de Paraguay y Brasil.

Los colaboradores no sólo colectan información, sino que participaron de diversas actividades para la conservación de la especie.

Gracias a este esfuerzo confirmó la presencia del jaguar para gran parte del Corredor Verde de Misiones en Argentina pero sólo para los mayores remanentes de selva de Brasil y Paraguay.

Los puntos de presencia más australes de la distribución del yaguareté fueron detectados en la región de Moconá de Argentina y Brasil. Este método de monitoreo a través de una red participativa demostró ser de gran utilidad para relevar la presencia de grandes carnívoros en áreas muy extensas y conocer qué factores afectan su supervivencia, ver Conservación del Hábitat.

Monitoreo de la población de yaguareté del Corredor Verde de Misiones

█ Contando jaguares, el álbum de fotos de los yaguaretés del Corredor Verde de Misiones

Desde el año 2003 año a año estamos instalando cámaras fotográficas que cuentan con sensores de movimiento y nos permiten tomar fotografías del yaguareté y sus presas. Estos equipos son llamados trampas cámara, y esta tecnología es fundamental para poder conocer cuántos jaguares habitan en la región, y además conocer cuáles son las presas disponibles y su abundancia.

Los jaguares tienen un pelaje manchado y el pelaje de cada animal es diferente, por eso tomándoles fotografías a los jaguares podemos reconocer a cada uno de ellos, seguirlos en el tiempo y contarlos. Ubicando estratégicamente muchas trampas cámaras en diferentes porciones del Corredor Verde, podemos tomar fotografías de muchos de los individuos que viven en la región. Pero además, si hacemos un buen diseño de cómo ubicamos las cámaras, podemos estimar con métodos estadísticos cuántos animales posiblemente se encuentren en la región pero no los estamos fotografiando. Así podemos tener un cálculo de cuántos animales habitan en la región.

De este modo, ya tenemos identificados a jaguares que habitan (hay individuos que salen fotografiados año tras año) o habitaron (ya que algunos individuos pueden haber muerto o migrado cuando ya no salen en las fotografías) en las áreas que muestreamos. Conocemos machos y hembras, también cachorros, y podemos tener algunas estimaciones de cuánto viven algunos individuos (ver álbum de fotos). Ellos tienen nombre, y de algunos jaguares ya podemos armar su árbol genealógico.

El trabajo con trampas cámara en diferentes sitios nos permitió estimar que en el Corredor Verde encontramos densidades de yaguareté muy bajas, sus densidades varían en función del nivel de protección contra la cacería que tienen las diferentes áreas (cuanto más cacería, menos jaguares). Esto nos indica que la población de yaguareté de esta región ha caído abruptamente entre los años ’90 (cuando el prestigioso investigador brasileño Peter Crawshaw Jr. hacía las primeras estimaciones en la zona de Iguazú), y los primeros años del nuevo milenio. Para el año 2004, la densidad de yaguareté en el Corredor Verde fue 3 ó 4 veces más bajas que las estimadas para 1995.

█ El tamaño de la población

Cuando unimos la información de densidades (cantidad de individuos por una determinada superficie de hábitat) con los mapas de distribución y modelos de hábitat obtenidos por la red de colaboradores y nuestro análisis del estado del hábitat. Pudimos obtener una estimación confiable del tamaño de la población de yaguareté del Corredor Verde. En esta región solamente quedan alrededor de 50 yaguaretés adultos, a los que se suman unos pocos juveniles y cachorros, lo que significa una población muy pequeña y seriamente amenazada de extinción. Estos resultados alertaron a las autoridades y otras ONGs y motivó el avance para contar con un Plan de Acción para conservar al yaguareté en la región.

Por lo tanto, gracias a las trampas cámara, hoy en día no solo sabemos cuántos jaguares quedan, sino también sabemos que las principales amenazas son la cacería de los jaguares y la cacería de sus principales presas, que también se ven diezmadas en las áreas menos protegidas y con mayor presión de cacería (Ver Monitoreo de presas). Otras amenazas como la mortalidad por atropellamientos, el potencial conflicto con los ganaderos y la pérdida de su hábitat.

Monitoreo de las presas del yaguareté, otros felinos y su dieta

El monitoreo con cámaras trampa es una herramienta muy importante para estudiar las presas del jaguar y otros felinos. Las trampas cámara se convierten en herramientas muy útiles para conservar al jaguar. Además de la información sobre la especie (Ver Monitoreo de la población de yaguareté del Corredor Verde de Misiones), estas cámaras registran a todos los animales medianos y grandes que transitan en una región. Así que gracias a las cámaras podemos conocer las especies de presas presentes, sus abundancias relativas en diferentes sitios, sus horarios de actividad, entre muchas otras cosas. A esto se suma que podemos estudiar otras especies de interés, como los otros felinos que habitan esta región, y saber si estas especies responden de la misma manera que los jaguares a las amenazas y medidas de conservación.

█ Haciendo dieta, Conociendo qué comen los jaguares

Una vez que sabemos cuál es la comida disponible, necesitamos conocer qué especies de presa los jaguares prefieren para comer en los diferentes sitios. Esto lo podemos saber gracias a la permanente recolección de heces a través del monitoreo de nuestra red de colaboradores (Ver Monitoreo de la distribución).

Con mucha paciencia y dedicación, la bióloga del Proyecto Yaguareté Lucía Palacio dedica largas horas a explorar la dieta de los jaguares. Para ello debe desarmar y procesar las heces de los jaguares para separar los diferentes tipos de pelos y restos de presas. Luego para cada tipo de resto, en una tarea similar a la de un médico forense debe hacer una minuciosa identificación, utilizando técnicas de lo que llamamos “tricología” (estudio de los pelos), en donde explora en el microscopio los patrones de las escamas de la superficie y la médula de los pelos, que es característico de cada especie de presa. Lucía ha creado una Guía de pelos de las especies de esta región para que toda persona en hacer este tipo de análisis tenga una fuente de consulta.